Compañero escondió el celular robado en sus calzoncillos, pero olvidó desactivar la alarma, la misma que lo delató.
Un agente de la Policía se encuentra bajo acusación por supuestamente apropiarse del teléfono celular de uno de sus colegas, en la misma comisaría donde ambos prestan servicio, específicamente en la comisaría de El Alambre.
La denuncia fue presentada por el suboficial de tercera, Wilson Argomedo Gómez. Según la versión de Argomedo, el robo tuvo lugar en el dormitorio utilizado para descansar. Al irse a dormir, dejó su ‘Samsung S21 Ultra’ a un lado de la almohada. Sin embargo, al despertar horas más tarde, el dispositivo ya no estaba allí. Al realizar varias llamadas para localizar el teléfono, Argomedo no recibió respuesta. En ese momento, una voz sorprendentemente se escuchó en la habitación: «Wilson Argomedo, es hora de levantarse». Era la alarma proveniente de la cama de uno de sus colegas que aún dormía.
Al acercarse, Argomedo descubrió que el suboficial Baca, apellidado así, había escondido el smartphone entre su pantalón y el calzoncillo. Aunque le había retirado la tarjeta SIM, aparentemente olvidó apagar el dispositivo. Indignado, Argomedo presentó de inmediato la denuncia, y el acusado fue intervenido. Actualmente, Baca enfrenta una investigación por presunto delito contra el patrimonio, en la modalidad de hurto.