Luego de un proceso legal que se extendió por casi siete años, Orlando, Segundo y Fortunado Sánchez Paredes, junto con Fidel Sánchez Alayo y Belisario Esteves, obtuvieron una resolución favorable en la primera instancia. La Fiscalía solicitaba una pena de 28 años de prisión.
Después de un prolongado proceso legal de siete años, la Corte Nacional de Justicia Penal Especializada emitió una sentencia absolutoria a favor de la familia Sánchez Paredes, que había enfrentado acusaciones de lavado de activos relacionados con el narcotráfico.
Al término de este extenso procedimiento, el Poder Judicial en primera instancia resolvió absolver a los integrantes de la familia Sánchez Paredes de los cargos de lavado de activos.
La Fiscalía peruana había formulado acusaciones en contra de los Sánchez Paredes, alegando que habían acumulado una fortuna a partir de fondos vinculados al narcotráfico y solicitando una pena de 28 años de prisión.
En marzo de 2016, el Ministerio Público también había requerido un pago de cien millones de soles como indemnización.
La decisión de la Tercera Sala Penal Superior Nacional Liquidadora Transitoria de la Corte Superior Nacional incluye a los individuos Fortunato, Orlando, Segundo Sánchez Paredes, Fidel Sánchez Alayo y Jesús Esteves Ostolaza.
Además, la sentencia dispone la eliminación definitiva del caso, lo que implica la anulación de los registros judiciales y policiales relacionados con esta causa.
Orlando, Segundo y Fortunato Sánchez Paredes, los hermanos que enfrentaban acusaciones de lavado de activos, han sido exonerados recientemente por un tribunal judicial.
Los jueces que rechazaron las pruebas presentadas por el Ministerio Público en contra de la familia Sánchez Paredes fueron Juan Santillán Tuesta, Máximo Maguiña Castro y Francisco Mendoza Ayma.