En nuevo operativo inopinado también se infraccionó a Estancia Muchick.
Prosiguiendo con el ordenamiento de la ciudad y velando por la salud y seguridad pública, personal de la Municipalidad Provincial de Trujillo intervino en horas de la noche del martes último a dos locales de venta de parrilladas y otros alimentos preparados, verificando que operen en regla.
Esta nueva intervención articulada estuvo a cargo de las subgerencias de Licencias y comercialización, Salud, Gestión del Riesgo de Desastres y del Servicio de Gestión Ambiental de Trujillo (SEGAT), sirvió para verificar las condiciones de atención en las cocinas, chimeneas, sistema eléctrico, servicios higiénicos, entre otros.
Esta vez los establecimientos visitados fueron Coco Torete, al que al final se le clausuró temporalmente por 30 días, y Estancia Muchik, que fue notificada para levantar a la brevedad las observaciones detectadas.
En Coco Torete, en la urb. San Andrés, no se brindaron las facilidades para la inspección rutinaria, al contrario, hubo resistencia y dilataron el inicio de la intervención. No tenían extintores contra incendios.
Allí se procedió a la clausura temporal del establecimiento por 30 días hábiles, como resultado de la inspección de la Subgerencia de Gestión del Riesgo de Desastres, que aplicó las infracciones: I-114, al no contar con Certificado de Defensa Civil vigente; y la I-115, por incumplir las disposiciones de la normativa contra incendio y/o código de electricidad.
La Subgerencia de Licencias y Comercialización levantó acta con los códigos B- 315, por no exhibir licencia en un lugar visible; y B-399-1 por no contar con autorización para anuncios publicitarios. Estas infracciones corresponden al 10% de la UIT y al 35% de la UIT respectivamente.
Por parte de SEGAT infraccionó con el código G-173 por la mala segregación de residuos sólidos.
En el Restaurant Parrillas Estancia Muchik, en la cuadra 4 de av. Larco, en La Merced, el SEGAT infraccionó con los códigos: G-172, debido a que la chimenea carece de la altura mínima; G-173, por no segregar los residuos sólidos reaprovechables; y G-174, por no aplicar norma técnica peruana de colores para los tachos de residuos.
La Subgerencia de Licencias y Comercialización, junto a Gestión de Riesgo del Desastre verificaron que el establecimiento cuenta con licencia de funcionamiento y certificado de ITSE en regla.
La Subgerencia de Salud, también levantó actas de la intervención indicando a los responsables de los locales las observaciones detectadas para que adopten acciones correctivas a la brevedad.