Científicos descubren que el envejecimiento se hace más drástico a los 40 y 60 años. Foto: Difusión

Un estudio reciente revela que el envejecimiento no es un proceso lineal, sino que se intensifica en dos momentos clave: a los 40 y 60 años. Estos periodos se caracterizan por cambios significativos en moléculas y microorganismos relacionados con el metabolismo, la inmunidad y la salud cardiovascular, entre otros.

Científicos descubren que el envejecimiento se hace más drástico a los 40 y 60 años. Foto: Agencia de Noticias

Un reciente estudio publicado en Nature Aging revela que el envejecimiento no ocurre de manera gradual y lineal, sino que se intensifica en dos etapas clave de la vida: alrededor de los 40 y los 60 años. En estos momentos, se producen cambios drásticos en las moléculas y microorganismos del cuerpo, afectando aspectos como el metabolismo, la regulación inmunológica y la salud de órganos y tejidos.

Hallazgos principales:

Cambios a los 40 años: Se detectaron alteraciones en moléculas relacionadas con el metabolismo del alcohol, la cafeína, los lípidos y enfermedades cardiovasculares, así como en la salud de la piel y los músculos.
Cambios a los 60 años: Hubo modificaciones significativas en el metabolismo de carbohidratos y cafeína, la función renal, la regulación inmunitaria y aspectos relacionados con enfermedades crónicas y envejecimiento.
Estos cambios podrían estar influenciados por factores biológicos y de estilo de vida, como el aumento del consumo de alcohol en la década de los 40 debido al estrés. El estudio enfatiza la importancia de adoptar hábitos saludables, como reducir el alcohol y aumentar la actividad física, especialmente en estas edades críticas.

Nuevas perspectivas del envejecimiento:

El genetista Michael Snyder y su equipo analizaron más de 135,000 moléculas y microorganismos en personas de entre 25 y 75 años. Descubrieron que el 81% de estos elementos no siguen un patrón lineal de cambio, sino que experimentan transformaciones marcadas en las etapas mencionadas. Este hallazgo desafía la concepción tradicional de un envejecimiento lineal a partir de los 30 años.

Además, Snyder había identificado previamente cuatro ageotipos o ritmos de envejecimiento en función de los sistemas biológicos más afectados: metabólico, inmunológico, hepático y nefrótico. Estos tipos permiten prever posibles enfermedades asociadas con la edad, aunque no son excluyentes entre sí.

Implicaciones prácticas:

El estudio resalta la necesidad de un enfoque preventivo en estas edades críticas para retrasar el envejecimiento y reducir el riesgo de enfermedades. Según los expertos, cuidar la salud a los 40 y 60 años debe ser una prioridad, ya que estas etapas representan momentos de mayor vulnerabilidad biológica.