Los expertos coincidieron en la urgencia de establecer un plan de seguridad integral y coordinado para combatir la criminalidad de manera efectiva.
La inseguridad en la región de La Libertad sigue siendo un problema grave, y así lo evidenciaron los datos compartidos en la conferencia magistral «Análisis de la Inseguridad» por tres destacados ponentes. En este evento, organizado por Grand Security Services en alianza con la Cámara de Comercio de La Libertad, advirtieron la falta de liderazgo y estrategias efectivas para combatir la criminalidad organizada.
El congresista de la República, Diego Bazán, enfatizó la necesidad de un liderazgo firme y una colaboración eficaz entre todos los sectores. «Se necesita un liderazgo claro, tanto del gobernador regional como de la presidenta de la República, para abordar eficazmente la inseguridad. El tema de seguridad está abandonado y no hay estrategias claras ni políticas públicas efectivas», afirmó Bazán.
Además, resaltó la importancia de que el gobernador de La Libertad, César Acuña, no se ausente del cargo para luchar contra la delincuencia. «El gobernador de La Libertad debe estar más presente y liderar las iniciativas contra la inseguridad en su región, en lugar de enfocarse en otros temas», expresó.
Por su parte, el exministro del Interior, general PNP (r) César Gentille, abordó los problemas de liderazgo y que las políticas de seguridad no sean continuas. «No hay una estrategia clara ni un plan de acción debido a la alta rotación de cargos en el Consejo Nacional de Seguridad Ciudadana y el Ministerio del Interior», explicó Gentille.
También señaló que La Libertad ha tenido nueve jefes en cuatro años, lo cual dificulta la implementación de políticas sostenidas y efectivas. «La región enfrenta desafíos como el aumento de homicidios por arma de fuego, secuestros y la explotación de terrenos, exacerbados por problemas como la minería ilegal», recalcó.
Asimismo, Guillermo Ruiz, experto en seguridad y director de Grand Security Services, indicó que es importante la coordinación entre los sectores público y privado. «Es importante que tanto el sector público como el privado coordinen esfuerzos para desarrollar un plan de seguridad que permita a la sociedad confiar en sus autoridades y ver resultados efectivos en la lucha contra la criminalidad».
Por otro lado, Ruiz también mencionó la necesidad de realizar diagnósticos y análisis previos para prevenir riesgos, y presentó a su empresa como una solución profesional y bien planificada para enfrentar estos desafíos.
Los especialistas estuvieron de acuerdo en la necesidad urgente de implementar un plan de seguridad integral y coordinado para enfrentar la delincuencia de manera eficaz. Algunos de las propuestas comentadas son las siguientes: el embargo de cuentas a quienes financian organizaciones criminales, una legislación más estricta que contemple la cadena perpetua para casos de organización criminal, y una reforma del sistema penitenciario.